jueves, 6 de junio de 2019

TÚ CONOCES TODO


Jn 21, 15-19

Habiéndose aparecido Jesús a sus discípulos, después de comer con ellos, le dice a Simón Pedro: «Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos?» Él le contestó: «Sí, Señor, tú, sabes que te quiero». Jesús le dice: «Apacienta mis corderos».

Por segunda vez le pregunta: «Simón, hijo de Juan, ¿me amas?» Él le contesta: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero». Él le dice: «Pastorea mis ovejas».

Por tercera vez le pregunta: «Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?» Se entristeció Pedro de que le preguntara por tercera vez: «¿Me quieres?» y le contestó: «Señor, tú conoces todo, tú sabes que te quiero». Jesús le dice: «Apacienta mis ovejas. En verdad, en verdad te digo: cuando eras joven, tú mismo te ceñías e ibas adonde querías; pero, cuando seas viejo, extenderás las manos, otro te ceñirá y te llevará adonde no quieras».

Esto dijo aludiendo a la muerte con que iba a dar gloria a Dios. Dicho esto, añadió: «Sígueme».


TÚ SABES QUE TE QUIERO

Esa respuesta de Pedro a Jesús cuando este le preguntó si lo quería debería ser una pequeña oración que tuviéramos permanentemente en nuestro corazón.

Y así, como una flecha, esa frase iría directa al Corazón de Dios. Jaculatoria bendita en la que le decimos a nuestro Padre todo cuanto quiere saber de nosotros.

Corazón con corazón, palabra a palabra, en lo más íntimo de nuestro interior no podremos decir otra cosa a Dios más que "Te quiero". 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.