Mt 7, 21. 24-27
"No todo el que me diga: ´Señor, Señor´, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial.
Así pues, todo el que oiga estas palabras mías y las ponga en práctica, será como el hombre prudente que edificó su casa sobre roca: cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos, y embistieron contra aquella casa; pero ella no cayó, porque estaba cimentada sobre roca. Y todo el que oiga estas palabras mías y no las ponga en práctica, será como el hombre insensato que edificó su casa sobre arena: cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos, irrumpieron contra aquella casa y cayó, y fue grande su ruina."
EL REINO ESTÁ EN TI
El Reino de los Cielos... ¿os lo habéis imaginado alguna vez? Allí todo será perfecto, habrá armonía, paz, misericordia infinita, amor verdadero...
Pero, ¿y si ese Reino estuviera ya aquí, en tu "casa", en tu interior, en tu corazón...? Si en nuestro corazón reina la armonía, la paz, la misericordia, el Amor... por muchas lluvias, torrentes, vientos impetuosos que embistieran contra nuestra "casa"... no caería, por estar cimentada sobre la Roca. Agárrate a esa Roca, que es Cristo para que ningún viento tormentoso te pueda vencer.
El Reino está en ti cuando dejas que Dios reine en tu vida, y entonces allí, en tu vida, todo será perfecto, habrá armonía, paz, misericordia infinita, amor verdadero. El Reino está en ti.
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